El Maíz

 

Se cree que el maíz no es una planta de evolución natural, sino mas bien fruto de la experimentación de los Aztecas en la agricultura, esto debido a que no hay antecedentes del maíz en una etapa evolutiva que indiquen un cambio moderado, sino mas bien un cambio radical entre el antecesor más cercano, además, pese a que está catalogado como un cereal, el maíz en realidad tiene algunas cualidades de leguminosa sobretodo en lo que a su forma se refiere, por lo que hay hipótesis que plantean que puede tratarse de un híbrido, lo cierto es que los tipos de maíz que conocemos hoy en día son indudablemente el producto del desarrollo agrícola tanto de Aztecas e Incas ya que los primeros fueron los que lo domesticaron, pero los segundos lograron mejorarlo y crearon además algunas variedades. Otro aspecto fundamental del maíz es que junto con el oro constituyeron el eje cultural de las civilizaciones precolombinas.

El maíz común se puede cultivar desde el nivel del mar hasta los 3200 m. de altura, siendo los 2300 la altura optima, además las temperaturas en las que puede ser cultivado varían entre los 11º y 17 º C.

En nuestro país, se consumen mayoritariamente tres tipos de maíz : el común, el morocho y el canguil; sin embargo la variedad se amplía si se toma en cuenta que la madures del grano o si este está fresco o seco, lo da lugar a una diversidad bastante grande de preparaciones; además sus hojas sirven para envolver masas y cocerlas como es el caso de los chigüiles y las humitas o choclo-tandas.

En lo que a la gastronomía ecuatoriana se refiere, al maíz se lo consume entero, sea cocido, frito, asado o tostado, en guisos, sopas o solo en preparaciones saladas y de dulce, por ejemplo, se puede consumir el choclo tierno y cocido o maduro y tostado, aunque hay preparaciones como el mote en las que el grano primero es secado, luego rehidratado y posteriormente cocido; también se aprovecha su contenido farináceo, de tal manera que sirve para hacer masas, coladas, panes, tamales, humitas, tortillas, etc. Ya sea  en forma de harina, para cuya preparación se calienta primero un poco al maíz hasta que obtenga una tonalidad dorada amarillenta antes de ser molido o bien el choclo o mote entero, cocido o sin cocer, que después es molido o licuado para hacer las masas o coladas. Cabe destacar que el maíz tiene un contenido graso un tanto alto en comparación con otras farináceas.

Además gracias a su contenido de azúcar, el maíz se presta para hacer la chicha, que puede ser de jora o de morocho que es de consumo masivo en las festividades indígenas de todo el país.

Destaca por la notable cantidad de hidratos de carbono que contiene. Aunque no aporta grandes cantidades de vitaminas (en pequeña cantidad provitamina A y folatos), sí es importante su aporte de ciertos minerales tales como el magnesio, el fósforo y el potasio. Además el maíz no contiene gluten y tiene un importante contenido de fibra.

Tabla de composición (100 gramos de porción comestible):

Kcal (n)

Proteínas
(g)

Hidratos de carbono
(g)

Fibra
(g)

Potasio (g)

Calcio
(mg)

Fósforo
(mg)

Magnesio
(mg)

Folatos
(ucg)

Provitamina A
(ucg)

86,0

3,22

19,02

2,70

270,0

2,00

89,0

37,0

45,80

28,0

Los criterios para elegir el maíz dependen según el uso que se le vaya a dar, por ejemplo si se quiere consumir como choclo, es preferible comprarlo en la mazorca y para verificar si está tierno se aprieta con la uña uno de los granos, si este se revienta y suelta un liquido blanco lechoso es fresco. En cuanto a los granos secos que sirven para otras preparaciones, hay que fijarse que el grano esté bien seco y que no esté arrugado, ya que esto es síntoma de que ha sufrido cambios por la humedad y su contenido de almidón se ha visto perjudicado o que el proceso de secado no se ha efectuado bien.